“Eres tan
tierno, detallista, sensible y perceptivo que casi pareces gay.”
Ayer por la
noche en medio de mis dudas sobre la orientación sexual de mi más reciente
crush, compré un libro titulado “Maridos Fuera del Clóset: ¡Cuidado! Tu
príncipe puede ser Cenicienta” el cuál terminé de leer en horas de la mañana.
Tuve en mis manos todos los secretos de los hombres -dícese- bisexuales y al
mismo tiempo las verdades que las involucradas en el asunto tenemos el derecho
de saber. Las líneas se resumen a la división de diez concretos tamices, pueden
juzgar la calidad del texto por el tiempo que me tomó leerlo, sencillamente me
atrapó lo cual es normal que suceda cuando estás desentrañando un cuasi
misterio ¿No? Adoptando al mismo tiempo un equipo espía cuya arma letal sonlos
ojos, mis niñas, manténganlos abiertos.
Al parecer
para muchos somos útiles para fungir como la pieza fundamental que mantiene su
imagen de machos Alfa con el resto de su circulo social. También servimos  para aumentar su autoestima, certificarles
que son buenos en la conquista y ayudarles a seguir creyéndose la mentira de
que no les gustan los hombres, somos algo así como unas cheerleaders y todo se
vuelve una relación que radica en la teoría del embudo. 
Lo curioso
o delatador de estos tipos es que nunca concretan, los coqueteos y cumplidos se
quedan en eso y nada más, olvídense de los besos apasionados, queridas. Su
sensibilidad se multiplica casi tanto como la nuestra cuando estamos en nuestro
período, quizás podríamos competir, no lo sé. El punto a discutir es ¿Por qué
nos volvemos ese pañuelo de lagrimas? ¿A qué nivel tenemos nuestra autoestima?
y ¿Qué pasa que no podemos notarlo hasta que ya estamos jodidamente
ilusionadas? Sin duda no podemos quitarles es crédito de su buena actuación,
funciona ante estas ilusas: aplausos.mp3
Este es un
llamado a todos aquellos que siguen dentro del clóset y que creen que su
mentira no ha sido descubierta: ¡Tengas bolas! y asumanse, sólo tienen tiempo
para definirse hasta los 20 años, después de ello están destinados y permitan
que nosotras seamos felices con el verdadero heterosexual pazón que nos destina
esta sociedad machista. 
Hay espacio
para todo pero no para las mentiras, menos para las que nos decimos a nosotros
mismos.
 
Be real.
No hay comentarios:
Publicar un comentario